Durante
este último mes las cosas han ido mejorando considerablemente, los niños cada
vez tienen mas confianza en mi y creo que les ofrezco mayor seguridad. En las
clases cada vez hago más cosas, soy como una más e incluso he llegado a contar
cuentos en italiano, aunque más de una vez me han pedido que se los cuente en
español, con los niños he disfrutado muchísimo, me han dado mucho cariño y solo
con verles sonreir, si tenias algún día regular se te pasaba.
A los
niños les gustaba las cosas en español, e incluso las canciones aunque no
entendían nada jaja. Yo a su vez he aprendido muchas canciones infantiles en
italiano.
Esta
experiencia me ha ayudado mucho para avanzar como profesional.
A medida
que se iba acercando el momento de la despedida me daba mucha pena porque tanto
a los niños como a las educadoras se les coge un cariño enorme y llegas a formar
parte de la familia.
El día de
la despedida lo pasé muy mal porque tenía las emociones a flor de piel y pensar
que era mi último día con esos pequeños era triste, a la hora de decir adios
tanto las educadoras como yo lloramos bastante pero bueno es parte del trato.
Me hicieron un pequeño regalo pero que se lo agradezco en el alma, una pulsera
con la figura de un niño, fue genial.
Esta
experiencia ha sido maravillosa e inolvidable y estoy completamente segura de
que la volvería a repetir muchas veces más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario